I.

...no es ninguna novedad la fiebre del sábado por la noche. No resulta ni gracioso haberse salvado por un momento de lo mismo de siempre. Es otra la cuestión. Tú sabes y yo sé, porque soy yo el que escribe la historia y por más que falle en acertarle, tarde o temprano se hará tarde. Tal vez demasiado y lo que quedará será la última canción, esa que aún no escuchas y que es muy probable nunca llegues a escuchar... pero que más da. Afuera todo se cae y no hay tiempo para discursos.


II.


...todos hablan, todos escuchan también... pero por sobre todas las cosas: todos hablan. Hay otros que los escuchan y que consideran que también deberían hacerse de carácter o al menos simularlo, y ponerse a tono con la maquinaria, y está bien, no? ... y algún día seremos dos, y quién sabe si tres, ah?...igual hay otros que han hecho cosas peores como escribir desfases en un diario, como establecer afirmaciones taradas, como hacer canciones malas malas, y opinar como si allí se fuera todo y a través de las mismas conseguir que las brutalidades adquieran realidad... y así salen diciendo que vamos para adelante,que no se qué, que aquí que allá, ¡y no han movido ni un centímetro de lo mismo que estaba en el mismo lugar de la misma forma hace un rato!!!


III.


...Tarde o temprano se hará tarde para creer que aún es tiempo, sin embargo cada mil pasos vuelvo a cabalgar como el jinete jóven que soy y aún me queda tiempo para sacarme incluso la foto reglamentaria... mientras todos cobran las apuestas que yo les he enviado como sin remitente para poco menos salvar sus dias y sus vidas. El de las rodadas soy yo, aunque no lo creas... y tengo tantas noches dulces que ya no se que hacer con ellas. Tú sabes.